viernes, 14 de marzo de 2014

Diario Guindalera. Semana Decimosexta. Hacia los confines de la imaginación

Atendiendo las propuestas de los chicos esta semana hemos viajado mucho. Primero cogimos la máquina del tiempo y nos fuimos a la era de los dinosaurios. Los mayores tienen ahora muy presente este tema así que me pareció divertido usarlo para nuestra clase. Lo aproveché para trabajar el ritmo, la cooperación y mucha gestualidad.
Recuperamos un juego tradicional que les encanta, la zapatilla por detrás,que nos sirvió para ayudarnos a entender normas, a que no siempre podemos ganar pero que aún así es divertido, y nos ayudó a sentirnos más unidos como grupo. No querían parar de jugar! Cada vez se llevan mejor, los pequeños están más serenos y seguros y los mayores cada vez más colaboradores y generosos.

La segunda mitad de la semana descubrimos la caja mágica, capaz de contener todo lo que invente nuestra imaginación. Tenían que adivinar lo que contenía a través de los gestos. Es genial ver como se asustan, se sorprenden, con los objetos invisible, y lo más divertido: Los que se acercan echan un vistazo al interior medio oculto y dicen "Lo he visto, lo he visto".
Luego nos fuimos al Polo Norte. Hacía mucho frío, así que nos abrigamos bien y construimos una variada colección de obstáculos orográficos que tuvimos que superar para llegar a una cueva donde había unas focas atrapadas. De vez en cuando alguno se congelaba y había que descongelarlo. Les gustó tanto la cueva que nos quedamos allí todos pegaditos, hicimos una hoguera y asamos sardinas que habíamos pescado bajo el hielo.
Sugerencia para hacer en casa (si no lo habéis hecho ya): Coger una sábana y cubrir la mesa del comedor. Meted algunos cojines y ya tenéis una cueva, una casita secreta, o lo que se os ocurra. Les encantan los sitios pequeños donde esconderse. Ah! Imprescindible meterse con ellos.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Diario Guindalera. Semana Decimoquinta. La vida es un Carnaval

Últimamente no llego a todo, así que disculpad el retraso con el blog. Me esforzaré por ser más puntual la próxima vez.
Esta semana el ambiente carnavalero lo inundaba todo, y claro está, nos zambullimos de pleno, creando personajes e historias basados en nuestros disfraces o en los disfraces que surgieran en el momento. Tuvimos nuestra particular fiesta de carnaval donde descubrimos como se celebra el carnaval en algunos lugares del mundo, Cádiz, Brasil, Venecia, ...y escuchamos y bailamos las canciones que se escuchan, cantan y bailan en carnaval, desde la chirigota a la samba.
La segunda parte de la semana os fuimos a una granja, donde unos eramos animales y otros granjeros. Construimos todos los escenarios que hacían falta y desde el canto del gallo no paramos de hacer cosas. Mientras unos preparaban la comida, otros recogían las verduras del huerto  y daban de comer a los animales. Y nos pasó de todo. Unos conejos se escaparon y se perdieron, pero menos mal que había una princesa que los encontró. De pronto el cabritillo se puso malo y contagió a varios animales más. Pero uno de los granjeros era también veterinario y los curo. Los gatos que teníamos por allí se transformaron en lobos y querían comerse a los animales. menos mal que el perro los asustó y la tortuga, que tenía una cuerda con veneno los mató.
Así pasamos el día en la granja, acabamos agotados, la vida en el campo es muy dura!
Por cierto, tenemos una nueva canción para bailar al comienzo de clase. El baile de los esqueletos se pasó de moda. Ahora pega Paketumetata, la canción de la tribu del teatro. Ya os sonorá,

ya.